PROPUESTA DIDÁCTICA

Jugar con el libro es dejar que la creatividad y la fantasía nos desborden hasta convertir al libro en un personaje con vida propia, capaz de pasearse por el aula o la biblioteca, hablándonos, contándonos su vida y haciendo que nos divirtamos.

    1. Leer un cuento y tomar solo los personajes. Con ellos, inventar un nuevo cuento que tenga o no relación con el original.
    2. De un cuento conocido, eliminar los personajes. Dejar solo los lugares y los acontecimientos, pero introduciéndole otros personajes creados por nosotros.
    3. Tomar de un cuento única y exclusivamente los lugares donde se desarrollan los hechos e inventar un nuevo cuento.
    4. Pasar el libro descubriendo los colores que hay en él. Cada niño nombra un color. Se escriben en la pizarra y con ellos se inventa, por ejemplo, un viaje: viajamos al rojo, al azul, al amarillo, al verde, … Y a la vez que viajamos volvemos a pasar el libro abriéndolo por páginas donde encontremos esos colores. Con las ilustraciones del propio libro, se va narrando una historia.
    5. Tomamos el libro en posición invertida e inventamos palabras nuevas que obtengamos de leer el texto al revés.
    6. Leemos una fábula y la narramos contando los hechos en sentido inverso: empezando por el final y acabando por el principio.
    7. Tomamos un libro de cuentos. Leemos varios. Tomamos a continuación al autor y le hacemos pasar como protagonista o como espectador por los cuentos que él mismo ha creado.
    8. A partir de las palabras que forman el título del libro que tenernos entre las manos, realizar un poema según algunas de las técnicas conocidas: encadenados, sumas y restas, etc.

(Continúa)

Propuesta didáctica (continuar leyendo en pdf)

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