Boris

BORIS.  TEXTO: Jaap teer Haar. ILUSTRACIONES: Juan García Editorial Noguer. Barcelona. 2002.

DESARROLLO DEL LIBROFÓRUM

Se trata de establecer asociaciones simbólicas con determinados objetos extraídos de un » saco maravilloso», con situaciones y hechos claves del relato. Esto nos permite llegar a una secuencia de la trama argumental.

Resumen

            Leningrado, en la Segunda Guerra Mundial, sufre un prolongado y duro asedio. Dos niños, Boris y Nadia, cruzan las líneas enemigas en busca de comida: unas tristes patatas.  Les sorprende una patrulla de soldados alemanes que, ante la sorpresa de los niños, les dan un buen trato, llevándolos de vuelta a las líneas rusas. Poco después, y a causa de una enfermedad, muere Nadia. Boris encuentra el diario de su amiga. La lectura del mismo le hace ver que lo mejor es afrontar la realidad, lo que le lleva a superar así su inseguridad y sus temores, acentuados desde que murió su padre.

            Al fin, las tropas rusas rompen el cerco y finaliza la guerra. Boris contempla el triste paso de prisioneros, entre ellos los soldados que una vez le ayudaron. Una idea queda patente: el enemigo es la guerra, no los hombres.

1. Presentación del libro a los lectores

1.1. Motivación a través del texto

            Se empieza leyendo a los participantes, colocados en semicírculo, los primeros párrafos de la obra:

«Boris Makarenko dormía. A lo lejos se oían tronar los cañones alemanes. Sobre la ciudad de Leningrado, demasiado orgullosa para seguir la lucha, caían bombas incendiarias, bombas de fósforo y granadas. Era el mes de diciembre de 1942. Boris Makarenko siempre soñaba lo mismo…Docenas de camiones avanzaban con precauciones sobre el helado lago Ladoga. En la superficie cubierta de nieve les acechaban grandes peligros. ¿Dónde estaban los puntos que no resistirían el paso del convoy? ¿Dónde se hallaban las grietas? La muerte los acompañaba con su mueca burlona, sin abandonar los camiones cargados de víveres que se dirigían hacia un Leningrado hambriento».

            Al leerlo, se procura transmitir toda la carga emotiva que dejan traslucir esos párrafos: melancolía, angustia vital… Cuando el animador observe que los lectores se van introduciendo en el ambiente de la obra haciendo suyos los sentimientos del protagonista, se termina la lectura y da comienzo a las actividades lúdicas de presentación.

(Continúa)

Desarrollo del librofórum (continuar leyendo en pdf)

Ilustraciones del libro. Proyección (en pdf)

Relación de los objetos de cada capítulo (en pdf)

Imágenes de los objetos de cada capítulo (en pdf)