EL DÍA QUE OLVIDÉ CERRAR EL GRIFO.  TEXTO e ILUSTRACIONES: Lucía Serrano Guerrero. Editorial Anaya. Madrid. 2006. Un día salí de la ducha y olvidé cerrar el grifo. Esa noche dormí a pierna suelta. Amaneció. Y me llevé una sorpresa. Decidí disimular. De camino al colegio, pude observar que no era el único que disimulaba. Y ocurrió algo fantástico: ¡el director nos mandó a todos a nuestras casas! ... (continúa) Presentación de diapositivas (en pdf) Si deseas más información o

EL DESTELLO DE HIROSHIMA.  TEXTO e ILUSTRACIONES: Toshi Maruki. Editorial Miñón. Valladolis. 1986. Aquella mañana, el cielo de Hiroshima estaba muy despejado. El sol calentaba con gran fuerza. Los siete ríos de Hiroshima fluían silenciosamente. Los tranvías iban despacio. A pesar de la guerra Tokio, Osaka, Nagoya y otras ciudades habían sido bombardeadas. Solo permanecía intacta Hiroshima. Sus habitantes decían con temor: "pronto nos tocará". ... (continúa) Presentación de diapositivas (en pdf) Si deseas más información o materiales de esta

EL CAZO DE LORENZO.  TEXTO e ILUSTRACIONES: Isabelle Carriere. Editorial Juventud. Barcelona. 2010. Lorenzo siempre arrastra un cazo detrás de él. El cazo se le cayó un día encima... No se sabe muy bien por qué. A causa de este cazo, Lorenzo ya no es como los demás. Necesita mucho cariño. --- (continúa) Presentación de diapositivas (en pdf) Si deseas más información o materiales de esta actividad, ponte en contacto conmigo.

EL CASTILLO DEL REY SISEBUTO.  TEXTO e ILUSTRACIONES: Colin West. Editorial Anaya. Madrid. 1989. Este es el castillo del Rey Sisebuto. Este es el paje Canuto, que lleva un paquete al castillo del Rey Sisebuto. Esta es a madre que guisa la cena del paje Canuto, que lleva un paquete al castillo del Rey Sisebuto. Este es el hombre que bate la crema y la vende a la madre que guisa la cena del paje Canuto, que lleva un paquete

EL ARTISTA QUE PINTÓ UN CABALLO AZUL.  TEXTO e ILUSTRACIONES: Erik Carle. Editorial Kalandraka. Sevilla. 2012. Franz Marc fue pintor. Nació en Alemania en 1880. Le encantaba pintar animales de colores brillantes y poco comunes. En su época no gustaron sus ideas innovadoras y sus pinturas con figuras estilizadas y colores peculiares. Franz Marc empezó pintado de forma más naturalista. Pero en 1903 viajó a París, donde conoció a pintores que pintaban con un estilo llamado impresionismo. Marc y otros

EL ÁRBOL DE LA ESCUELA.  TEXTO: Antonio Sandoval. ILUSTRACIONES: Emilio Urberuaga. Editorial Kalandraka. Pontevedra. 2016. En el patio de la escuela había un árbol. Solo uno. A Pedro le gustaba correr cerca de aquel árbol durante los recreos. Cuando pasaba a su lado lo miraba de reojo para no chocar con él. Un día se detuvo y se fijó en su aspecto. Era delgaducho, con ramas finas, como de alambre, y tenía unas pocas hojas secas. Pedro se acercó y

EL ALIEN APESTOSO.  TEXTO e ILUSTRACIONES: Kate Leake. Editorial Susaeta. Madrid. 2005. En la luna mohosa, en un cráter de queso, vive el pequeño Alvin, un alien muy travieso. Harto de cabrales, puso rumbo a otro planeta, y salió disparado como si fuese un cometa. Años luz más tarde, se quedó sin carburante, y bajó a repostar al planeta Pies gigantes. - ¡Pero aquí huele a pezuña! ¡Qué gente más cochina! - ¡Lo que tengo que hacer por echar gasolina!

DONDE VIVEN LOS MONSTRUOS.  TEXTO e ILUSTRACIONES: Maurice Sendak. Editorial Kalandraka. Pontevedra. 2014. La noche que Max se puso el traje de lobo y se dedicó a hacer travesuras de una clase y de otra, su madre le llamó ¡Monstruo!, y él le contestó ¡Te voy a comer!, y lo mandaron a la cama sin cenar. Esa misma noche nació un bosque en la habitación de Max y creció hasta que había lianas colgando del techo y las paredes se

DATE PRISA, VE DESPACIO.  TEXTO e ILUSTRACIONES: Layn Marlow. Editorial Jaguar. Madrid. 2012. La liebre casi siempre tiene prisa. Sin embargo, la tortuga, no. A la tortuga le gusta dormir hasta tarde por la mañana. - ¡Date prisa… despiértate! Y hace estiramientos antes de levantarse. - ¡Date prisa… levántate! La tortuga cruza el arroyo con cautela. - ¡Date prisa… sígueme! Le gusta comer el almuerzo sin apuros. - ¡Date prisa… acaba de comer! Y mastica cada hoja por lo menos

CUÁNTO CUENTA UN ELEFANTE.  TEXTO e ILUSTRACIONES: Helme Heine. Editorial Altea. Madrid. 1982. Érase una vez un pequeño elefante con un gran apetito. Pacía de la mañana a la noche hierba y hojas, hojas y hierba. No paraba hasta que se hartaba. Luego se echaba a dormir y soñaba con gigantescas montañas de heno. Las atravesaba y las devoraba glotonamente de parte a parte. Cuando se despertaba por las mañana se limpiaba los colmillos, bebía 100 litros de agua y